Manuel Ramírez de Carrión
Manuel Ramírez de Carrión (Hellín, 1579 - Valladolid, c. 1654) fue un pedagogo pionero en la enseñanza del habla a sordomudos. Hijo de padres toledanos, no se conoce qué formación pudo tener, si bien ya se cree que en su juventud pudo enseñar a hablar a un mudo en su localidad natal, lo que le parangona a otras figuras españolas de su época como Fray Pedro Ponce de León o Juan de Pablo Bonet. [1]
Tal vez en 1607, su fama le llevó a Montilla para usar de sus habilidades con Alonso Fernández de Córdoba, marqués de Priego. Más adelante hacia 1615, se ocupó en idéntica tarea con un hijo de la duquesa de Frías en Madrid. Retornó a Montilla dos años después, donde contrajo matrimonio y ejerció como bibliotecario del marqués.[2]
En 1629, publicó sus Maravillas de la Naturaleza, en dos ediciones, una en Montilla y otra en Córdoba, obra que técnicamente no es una obra sobre la enseñanza de los sordomudos, sino más bien una colección de aforismos médicos y filosóficos. En 1636 llegaría a Madrid la princesa de Cariñano, María de Borbón Soissons, con su hijo sordomudo Manuel Filiberto, logrando de Felipe IV que llamara a Madrid a Carrión, en carta del 10 de octubre de 1636, para educar al príncipe; logró Carrión un resultado tan sorprendente que el Rey lo nombró su secretario. Después de la marcha del príncipe a Italia, Carrión retornó a Madrid hacia 1645. Sus últimos años son casi totalmente desconocidos, documentándose su fallecimiento en Valladolid alrededor de 1654.[3][4]
Referencias
- ↑ Gran Enciclopedia de España, Zaragoza: Oroel, 1990, páginas 8603-8604. ISBN 978-8487544019.
- ↑ A. Gascón y J. G. Storch, Historia de la educación de los sordos en España y su influencia en Europa y América, Madrid, Centro de Estudios Ramón Areces, 2004 (col. Por más señas), págs. 277-282.
- ↑ T. Navarro Tomás, “Manuel Ramírez de Carrión y el arte de enseñar a hablar a los mudos”, en Revista de Filología Española, 11 (1924), págs. 225-266.
- ↑ A. Rojo Vega, Testamento de Manuel Ramírez de Carrión (Valladolid, 1654), en "Al-Basit", XXVII, 46 (2002), págs. 277-282.