Impresora térmica
La impresora térmica se basa en una serie de agujas calientes que van recorriendo el papel termosensible, que al contacto se vuelve de color negro.[1]
Por su bajo costo, son muy usadas en los cajeros automáticos y supermercados.
La velocidad de impresión se mide en milímetros por segundo (mm/s), refiriéndose a los milímetros del rollo de papel que salen de la impresora.
Este tipo de impresora puede clasificarse como impresora: sin impacto; de caracteres de puntos matriciales; carácter a carácter; e impresora de solo texto.
Ventajas
- Los costes por copia son muy bajos porque no consume más que el propio papel.
- No se requiere de una configuración avanzada para su correcto funcionamiento.[2]
Desventajas
- La impresión térmica solamente posibilita la impresión en monocromo color negro, y únicamente en los modelos más recientes mediante un papel especial adicionalmente en rojo o azul.
- La velocidad de impresión oscila habitualmente entre 100 y 206 mm/s.
- La durabilidad de la impresión es relativamente baja porque el desgaste del papel, en particular en ambientes con temperaturas altas, hace que se borre el texto escrito en el mismo y huelen fatal al ser quemados
Referencias
- ↑ http://www.merriam-webster.com/dictionary/thermal%20printer
- ↑ Barcode Site. «¿Cómo imprimir con impresora térmica directa?». Consultado el 31 de julio de 2025.