Emigración Guipuzcoana a Argentina en el siglo XIX

Emigrantes partiendo desde un puerto del Cantábrico a ultramar.

La emigración desde Guipúzcoa (España) a Argentina en el el siglo XIX movilizó a un importante número de personas en busca de nuevas oportunidades económicas y sociales que no encontraban en su lugar de origen.[1]

Entre las causas principales destacaron la crisis económica derivada de las guerras carlistas (1833-1876), que afectaron duramente a la región, así como la vigencia del sistema de mayorazgo, propio del País Vasco, que limitaba el acceso a la propiedad de la tierra a los hijos no herederos.[2]

Las redes migratorias desarrollaron un entramado comercial y social que unía las localidades de origen con los destinos en América. En este circuito participaban agentes de emigración, notarios, capitanes de barco y compañías navieras.[3]

Los principales puertos de salida de emigrantes fueron Pasajes (Gipúzcoa) y Burdeos (Francia). Durante todo el siglo XIX, el destino más demandado fue Argentina, seguido por Uruguay.[4]

Contexto histórico

En 1853, un cambio legislativo en España eliminó los obstáculos que restringían la salida de sus naturales hacia las repúblicas de América del Sur, lo que facilitó el flujo migratorio desde la península ibérica hacia el continente americano.[5]

Durante el siglo XIX, la provincia de Guipúzcoa experimentó profundas transformaciones económicas y sociales, derivadas de la crisis agrícola, ganadera e industrial, acentuada por las consecuencias de las guerras carlistas. La escasez de empleo, el aumento de la presión demográfica debido al crecimiento poblacional y las limitadas oportunidades de ascenso social impulsaron a numerosos guipuzcoanos a emigrar en busca de mejores condiciones de vida en América, particularmente en la República Argentina.[6]

Argentina, por su parte, atravesaba un proceso de consolidación nacional tras la independencia y fomentaba activamente la inmigración europea, en particular hacia las provincias del litoral y el centro del país. La política argentina ofrecía incentivos como tierras de cultivo y facilidades de asentamiento, lo que resultó atractivo para numerosos migrantes guipuzcoanos.[7]

Cartel de naviera para emigración y viajes a América en la prensa. (1900)

Las principales actividades desarrolladas por estos inmigrantes fueron la agricultura y la ganadería, en especial como pastores. Otros se dedicaron a la artesanía y al comercio, sectores en los que pudieron aprovechar la experiencia adquirida en su lugar de origen.[8]

Una vez en territorio argentino, las redes familiares y comunitarias desempeñaron un papel fundamental en la integración de los guipuzcoanos. Los vínculos con compatriotas ya establecidos facilitaron tanto el acceso a empleos y tierras como la creación de negocios propios, lo que contribuyó a la consolidación de una activa colectividad vasca en distintas ciudades y áreas rurales.[9]

Hasta la primera mitad del siglo XIX, la emigración guipuzcoana hacia América fue limitada y se realizaba en barcos de vela, lo que convertía la travesía en un viaje largo y penoso.

La gran expansión del fenómeno migratorio tuvo lugar entre 1870 y 1890,coincidiendo con el uso de barcos a vapor que redujo significativamente la duración del trayecto y las empresas de emigración extendieron su influencia a numerosos municipios de Guipúzcoa.[10]

Este entramado migratorio fue recibido con recelo por parte de la Iglesia y de determinados sectores sociales, que consideraban que la emigración privaba a las comunidades locales de población joven y emprendedora. Además, las promesas de prosperidad difundidas por las compañías de emigración no siempre se correspondían con la realidad y, además, en muchos casos las condiciones de viaje resultaban precarias.[3]

Una prioridad de los emigrantes vascos en Argentina fue preservar y transmitir su cultura y tradiciones, lo que dio lugar a la fundación de diversas asociaciones y centros de encuentro. Entre ellas destacó la sociedad Laurak Bat (las siete, una en español), establecida en Buenos Aires en 1877, considerada la primera institución vasca formal en el país y un punto de referencia para la colectividad. Estas entidades fomentaron la cohesión comunitaria, la práctica de actividades culturales y deportivas, así como la asistencia mutua entre los inmigrantes.[11]

Algunos emigrantes retornaron con el tiempo a sus localidades de origen. Aquellos que habían alcanzado mayor prosperidad económica levantaron caseríos y palacetes conocidos como "de indianos", edificaciones que aún hoy forman parte del patrimonio arquitectónico y de la fisonomía característica de numerosos municipios guipuzcoanos.[12]

Antonio Iriarte. Agente de inmigración en Tolosa. siglo XIX.

Conclusiones

La emigración guipuzcoana a Argentina en el siglo XIX fue multitudinaria y presentó características definidas en cuanto a género y edad. Las mujeres representaron una minoría dentro del flujo migratorio, alcanzando aproximadamente un 38 % en el periodo 1856-1864 y un 30 % entre 1875 y 1880. En contraste, los jóvenes estuvieron ampliamente representados: entre 1865 y 1877, cerca del 40 % de los emigrantes tenía entre 10 y 20 años.[13]

El perfil más habitual del emigrante guipuzcoano era, por tanto, el de un joven varón y soltero.

La magnitud del fenómeno puede apreciarse al comparar las cifras de población y emigración: en 1877, Guipúzcoa contaba con unos 167 000 habitantes, mientras que se estima que varias decenas de miles de personas emigraron a Argentina durante el siglo XIX, principalmente en su último tercio, siendo el Goierri la zona que más emigrantes aportó.[14]

Véase también

Referencias

  1. Iriani, Marcelino. «La experiencia laboral». Enciclopedia Auñamendi. 
  2. «La inmigración vasca en la Argentina». Fundación Vasco - Argentina Juan de Garay. 
  3. a b «La partida la travesía». Instituto Cultural Vasco. 
  4. Iriani, Marcelino. «INMIGRACION VASCA A LA ARGENTINA 1840/1920». Tesis de Doctorado. Tandil. 
  5. «Caminos del mar: los barcos de la emigración». Gobierno de España. 
  6. «Causas de la inmigración vasca contemporánea». Gobierno Vasco. 
  7. «El Camino de los Inmigrantes». Museo de la inmigración. 
  8. «Argentina. Inmigrantes vascos 1840-1920». Enciclopedia Auñamendi. 
  9. «Argentina. Integración social de los inmigrantes vascos». Enciclopedia Auñamendi. 
  10. Azcona, José Manuel. «Emigración vasca contemporánea». Enciclopedia Auñamendi. 
  11. «Centro Vasco Laurak Bat». Museo de la inmigración. 
  12. «Cuando en Guipúzcoa se emigraba a América con 11 años». Diario Vasco. 
  13. Lorente, Victoria. «La emigración española a Argentina en el tercer cuarto del Siglo XIX». Asociación Complutense de Investigaciones Socioeconómicas sobre América Latina (ACISAL). 
  14. Pildain, María Pilar. «La emigración Vasca a América». Archivo de Protocolos de Oñate.