Primera universidad de América


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La primera universidad de América fue la Universidad de Santo Tomás de Aquino en Santo Domingo, erigida oficialmente mediante la bula In Apostolatus Culmine, expedida por el papa Paulo III el 28 de octubre de 1538. Como era costumbre en la época, las universidades se fundaban por mandato pontificio, y esta institución nació con los mismos privilegios que las de Salamanca y Alcalá de Henares, también creadas mediante bulas papales. De este modo se constituyó en el origen de la educación superior en el Nuevo Mundo. Su gestión inicial correspondió a la Orden de Predicadores, que ya había establecido en la isla un convento y centro de estudios en 1518, el cual fue elevado a rango universitario a petición de los mismos.
Posteriormente, con el reinado de su hijo, Felipe II, se consolidó la necesidad de obtener el pase regio como validación oficial por parte de la Corona. La universidad recibió esa convalidación mediante Real Provisión el 23 de febrero de 1558, lo que le otorgó formalmente el título de “Real y Pontificia Universidad Santo Tomás de Aquino”.
La Universidad forma parte, junto con la primera catedral, el primer hospital y la primera oficina de aduanas, del conjunto de instituciones primadas de América establecidas en la ciudad de Santo Domingo.[1]
Universidad de Santo Tomás de Aquino (1538 - siglo XIX)
La Universidad Santo Tomás de Aquino, en la actual República Dominicana, ostenta la primacía entre las universidades de América por haber sido erigida mediante la bula In Apostolatus Culmine del papa Paulo III, fechada el 28 de octubre de 1538. Esta fundación no requirió del pase regio del rey Carlos I de España, ya que en ese año aún no existía tal requisito.
En realidad, fue el propio papa quien la erigió a solicitud de la Orden de Predicadores (dominicos), que habían establecido en la ciudad de Santo Domingo, a inicios del siglo XVI, el primer convento de su orden en el continente americano.
Otorgándole la misma importancia y privilegios que a las universidades ya existentes en España, se transcribe a continuación dicho documento.
A continuación, se presenta la traducción de dicha bula. El texto original estaba redactado en latín, lengua oficial del Estado Vaticano y de la Iglesia Católica.
Bula In Apostolatus Culmine, 28 de octubre de 1538 (traducción al español):Nos, Paulo III, por divina providencia Sumo Pontífice, considerando los abundantes frutos que proceden del estudio de las letras tanto para gloria de Dios como para utilidad de la república cristiana, y deseando proveer a que todos los fieles, incluso los religiosos bajo observancia regular, puedan alcanzar, mediante sus méritos y estudios, los honores y recompensas de su labor, a solicitud de los religiosos de la Orden de Predicadores establecidos en la ciudad de Santo Domingo, en la isla Española de las Indias Occidentales, donde fundaron un convento de su orden, concedemos y erigimos por la presente, con autoridad apostólica, una Universidad General de Doctores, Maestros y Estudiantes, similar a la de Alcalá de Henares en el reino de Castilla.
Esta universidad estará regida por un Rector o Regente, y podrá conferir, conforme a los usos y costumbres de las universidades del Reino de España, los grados de bachiller, licenciado, maestro y doctor, en todas las facultades legítimas de letras. Los grados serán otorgados previo examen y con la asistencia de cuatro doctores en la respectiva facultad, nombrados por el prior del convento y el regente de la universidad. En ausencia de doctores, podrá hacerlo el regente o el obispo de Santo Domingo.
Conferimos también a esta universidad todos los privilegios, preeminencias, inmunidades y libertades de que gozan las demás universidades españolas, especialmente las de Alcalá y Salamanca. Permitimos también que la universidad establezca sus propias normas, estatutos y reglamentos, conforme a las necesidades del lugar, y pueda modificarlos, corregirlos y reformarlos cuando lo estime conveniente.
Otorgamos estos privilegios no obstante cualquier constitución apostólica o sinodal contraria, privilegios o indultos concedidos a otras universidades, así como estatutos municipales o pragmáticas sanciones, aun si requieren mención expresa o forma especial para ser derogados. Si alguien intentare contravenir esta bula, sepa que incurrirá en la indignación de Dios Todopoderoso y de los santos apóstoles Pedro y Pablo.
Dado en Roma, en San Pedro, el 28 de octubre del año del Señor de 1538, cuarto de nuestro pontificado.
Fundación de otra universidad y conflicto
En el transcurso del siglo XVIII, la ciudad de Santo Domingo fue escenario de tensiones académicas y eclesiásticas derivadas de la coexistencia de dos instituciones universitarias. A la Universidad Santo Tomás de Aquino, fundada por los dominicos en 1538 mediante la bula In Apostolatus Culmine de Paulo III, se sumó en 1747 la Universidad de Santiago de la Paz y Gorjón, establecida por la Orden de Frailes Menores a través del Colegio de la Compañía de Jesús, con respaldo de una Real Cédula del rey Fernando VI.
La aparición de esta segunda universidad provocó un conflicto de prelación y autoridad con los dominicos, que reclamaban para Santo Tomás el título de “Universidad Primada de las Indias” en virtud de su mayor antigüedad. Los jesuitas, en cambio, contaban con el aval real y alegaban que dicho título no había sido otorgado oficialmente por la Corona.
El pleito se elevó ante el Consejo de Indias y culminó con la Real Cédula de 1758, en la que Fernando VI prohibió a Santo Tomás autodenominarse “Primada de las Indias”, basándose en la ausencia del documento original de su bula fundacional y en la voluntad de la monarquía borbónica de reafirmar su control sobre las instituciones educativas en América.
La Real Cédula de 2 de agosto de 1758 prohibió el uso del título de “Primada de las Indias” tanto a la Universidad de Santo Tomás de Aquino como a cualquier otra universidad americana, reservando ese privilegio exclusivamente a la autorización real.
Este documento en mención indica lo siguiente:
«EL REY. Venerable y devoto Padre Rector de la Universidad de la Compañía de Jesús, de la ciudad de Santo Domingo, en la Isla Española. Por parte del Padre Jaime de Torres, de la misma Compañía, y Procurador general de las Provincias de Santa Fee y Quito, se me ha representado que por mi Real Cédula de veinte y seis de Mayo de mil setecientos quarenta y siete, fuy servido de erigir en Universidad ese Colegio, trasladando a él las facultades, privilegios y rentas que gozaba la que por otra de veinte y tres de Febrero del año de mil quinientos cincuenta y ocho, se fundó en el de Gorjon; y sin embargo de que el Convento de Santo Domingo de esa propria Ciudad no tenía Título para continuar en la posesión en que avía estado de Universidad, por no aver exsivido la Bula original de erección, y aunque lo huviera executado le faltaba mi Real condescendencia y el Pase de mi Consejo de las Indias para su uso, sin lo qual no podía tenerle en esos mis Dominios: asentí igualmente á la súplica de que el enunciado convento fuese también erigido en Universidad y Estudio General, como todo mas difusamente consta de la enunciada Real Cédula de veinte y seis de Mayo de mil setecientos quarenta y siete; y aunque por ella fuy servido, al parecer, de dar el primer lugar a la de vuestro cargo, no solo por aver hecho mención de ella y de sus privilegios antes que la de Santo Thomas; sino porque respecto de aquella, se cita la mencionada Real Cédula del año mil quinientos cincuenta y ocho, de que carece la referida de Santo Thomas, como del Pase necesario de su Bula: no obstante la de vuestro cargo, observantissima de la paz y union que debe reynar entre las dos Religiones, y fue el fin esplicado en la citada mi Real Cédula del año mil setecientos quarenta y siete; y teniendo presente el respeto que se me debe, y que es propia mia la prerrogativa de declarar semejantes preferencias y primacías, jamas presumió apropiarse el Título de Universidad primaria, persuadida a que igualmente se abstendría de él la de Santo Thomas, arreglandose a los mismos dictamenes de la paz; pero que vio frustradas estas bien fundadas esperanzas el año próximo pasado, quando por el mes de Junio en Asertos de convite para publicar Conclusiones y en Carta que os escrivió, se tituló Universidad Primada de las Indias; injuriando en esto no solo a la de vuestro cargo, sino también a las de México y Lima y otras de la America; y que por no usado hasta entonces os causó novedad; pero que porque no pareciese que autorizabais con el disimulo la primacía que no tiene, ni Yo le avía concedido a la de Santo Thomás, os considerasteis obligado a contradecir el enunciado Título, protextando de que no admitiriais los Asertos, si no se borraba lo de Primada, como consta del Testimonio del Secretario de la vuestra que presentaba; y sin embargo de que por ésta solo se desea la paz entre las dos Religiones, como se mantiene en las Ciudades de Santa Fee y Quito, en donde tienen Universidad ambas, sin que ninguna piense en intitularse primaria o más antigua, me suplicaba fuese servido de dar la providencia que fuese de mi Real agrado, para que se eviten los disturvios e inconvenientes, y se desarraygue el principio de la discordia, declarando qual de las dos Universidades ha de gozar la antigüedad y preferencia, o si deben ambas abstenerse de usar el Título de Primera o más antigua, a fin de que quede como inviolable Ley establecido en lo sucesivo desde ahora lo que Yo determinare. Y aviendose visto la referida en mi Consejo de las Indias, con lo que en su inteligencia y de otra representación vuestra que se ha presentado en él, con fecha de treinta de Julio del citado año próximo pasado, en que con justificacion dais cuenta de este nuevo acaecimiento, expuso mi Fiscal; ha parecido declarar, como por la presente Real Cedula declaro, no competer a la mencionada Universidad del Colegio de Santo Thomas el Título de Primada, ni otro alguno que denote anterioridad o preheminencia a la de vuestro cargo, ni a esta respecto de aquella; y de consiguiente, que fue justo y bien fundado vuestro reparo, y en su consecuencia rogaros y encargaros (como lo executo) que en lo subcesivo se arreglen ambas a lo que se ha practicado desde el recibo de la mi citada Real Cédula de ereccion, hasta el acto de la novedad que dió motivo a esta instancia, previniendoos observeis y guardeis por vuestra parte y todos los demás vuestros succesores en el mismo cargo aquella paz y buena armonia que corresponde, para el logro de los loables fines de su Institución y mayor aprovechamiento de sus alumnos y cursantes, en que tanto se interesa la causa publica y mi Real servicio; en inteligencia de que por Despacho de este dia se previene al Rector de la de Santo Thomas lo conveniente al proprio fin, por ser asi mi voluntad. Fecho en Aranjuez, a dos de Agosto de mil setecientos cincuenta y ocho.»Real cédula del rey Fernando VI de España, 2 de agosto de 1758.[2]
Siglos después, la Universidad de Santo Tomás de Aquino fue clausurada a inicios del siglo XIX como consecuencia de las guerras de independencia y de la creación de la actual República Dominicana, país que heredaría la institución. Desde la proclamación de la república, tanto el Estado dominicano como la Iglesia se encargaron de resguardar la universidad, hasta que en 1961 se le concedió autonomía plena, pasando a denominarse Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD).[2][3][4]
Universidad Nacional Mayor de San Marcos (1551 - presente)
La Universidad Nacional Mayor de San Marcos del Perú es reconocida como la universidad más antigua en la parte continental de América, y se afirma que es la que ha funcionado de manera ininterrumpida durante más tiempo desde su fundación. También es reconocida por haber sido la primera universidad establecida con autorización real mediante Real Cédula y Real Provisión. Sin embargo, existe debate sobre su consideración como la primera institución de educación superior de América.
Esto se debe a varias razones:
- Ya se había fundado una universidad en la ciudad de Santo Domingo, la primera ciudad establecida en suelo americano, dependiente entonces del virreinato colombino, el primero en América. Esta universidad fue creada por bula papal, como correspondía a la tradición eclesiástica de la época.
- Se sabe que dicha universidad no contó con pase regio porque en el momento de su fundación (1538) no era necesario. Ello se explica porque se estableció en los inicios de la colonización. Cabe señalar que las expediciones que dieron origen a los virreinatos del Perú y de México partieron precisamente de Santo Domingo.
- La Universidad de San Marcos no contó con bula papal en el momento de su fundación, lo que impedía otorgar grados canónicos en disciplinas religiosas como la Teología.
- Para poder funcionar como universidad plena, era necesaria la obtención de una bula, la cual fue concedida el 25 de julio de 1571. Hasta esa fecha, San Marcos no tuvo carácter de universidad pontificia.
No obstante, la Universidad de San Marcos sostiene dos títulos históricos que la distinguen:
- Haber sido la primera universidad creada por Real Cédula y Real Provisión de la Corona española, el 12 de mayo de 1551. De este modo, fue la primera universidad de América oficialmente constituida con todas las formalidades reales, aunque no las canónicas exigidas en la época, hasta la bula de 1571.
- Ser la única de las universidades fundadas en el siglo XVI que ha operado sin interrupciones hasta el presente. Este hecho es relevante, ya que muchas universidades americanas fueron clausuradas durante las guerras de independencia hispanoamericanas o posteriormente por conflictos internos.
Al respecto, la Real Cédula de la Universidad de San Marcos indica su fundación oficial el 12 de mayo de 1551:
«DON CARLOS por la Divina Clemencia, Emperador siempre Augusto, Rey de Alemania. Doña Juana su Madre, y el mismo Don Carlos por la gracia de Dios, Reyes de Castilla, de León, de Aragón, de las dos Cicilias, de Jerusalén, de Navarra, de Granada, de Toledo, de Valencia, de Galicia, de Mallorcas, de Sevilla, de Cerdeña, de Córdova, de Córcega, de Murcia, de Jaén, de los Algarves, de Algezira, de Gibraltar, de las Islas Canarias, de las Indias, Islas, é Tierra Firme del Mar Océano, Condes de Flandes, y de Tirol, &. Por quanto Fray Thomas de Sant- Martín de la Orden de Santo Domingo, Provincial de la dicha Orden en las Provincias del Perú, nos ha hecho relación, que en la Ciudad de los Reyes de las dichas Provincias está hecho, y fundado un Monasterio de su Orden en el cual ay buen aparejo para se hazer Estudio General el qual sería muy provechoso en aquella tierra: porque los hijos de los Vecinos de ella, serían doctrinados, y enseñados, y cobrarían abilidad, é nos suplicó fuessemos servidos de tener por bien, que en el dicho Monasterio oviesse el dicho Estudio General con los privilegios, franquezas, y livertades, que ha, y tiene el Estudio y Universidad de la Ciudad de Salamanca, ó como la nuestra merced fuesse, y nos por el bien y ennoblecimiento de aquella tierra, hemoslo havido por bien por ende por la presente tenemos por bien, y es nuestra merced, y voluntad, que en el dicho Monasterio de Santo Domingo de la Ciudad de los Reyes, por el tiempo que nuestra voluntad fuere, entre tanto se dá orden como esté en otra parte donde más convenga en la dicha Ciudad pueda haver, y aya el dicho Estudio General, el qual tenga, y goze de todos los privilegios, franquezas y excepciones, que tiene, y goza el Estudio de la dicha Ciudad de Salamanca, con tanto q. en lo que toca á la jurisdicción, se guarde, y esté como ahora está, y que la Universidad de el dicho Estudio no execute jurisdicción alguna, é con los que allí se graduaren no gozen la livertad, que el Estudio de Salamanca tiene de no pechar los allí graduados. Y mandamos al nuestro Presidente, y Oydores de la nuestra Audiencia Real de las dichas Provincias del Perú, y otras qualesquier nuestras Justicias de ellas, y de las otras Islas, y Provincias de nuestras Indias, que guarden, y cumplan esta nuestra Carta, y lo en ella contenido, y contra el thenor, y forma de ella, ni de lo en ella contenido no vayan, ni passen, ni consientan ir, ni passar en tiempo alguno, por alguna manera. Dada en la Villa de Valladolid a doce dias del mes de Mayo de mil quinientos cinquenta y un años.»
Otras Universidades más antiguas de América que han mantenido continuidad:
- Universidad de La Habana (Cuba)
- Fundada en 1728 por bula papal de Inocencio XIII y Real Cédula de Felipe V.
- Ha operado ininterrumpidamente, incluso tras la independencia de Cuba (1898) y durante el siglo XX.
- Universidad de Santo Tomás (Filipinas) – aunque no es América, sirve de paralelo colonial hispánico. Fundada en 1611, sigue activa sin interrupción.
Universidades más antiguas de América que no tuvieron continuidad total:
- Universidad de México (1551) - tuvo cierres en el siglo XIX.
- Universidad de Córdoba (1613, Argentina) sí ha funcionado desde su fundación, aunque tuvo cambios administrativos y reformas.
- Universidad de San Antonio Abad del Cusco (1692, Perú) tuvo períodos de inactividad.
Véase también
- Universidad Nacional Mayor de San Marcos
- Universidad Autónoma de Santo Domingo
- Universidades y colegios virreinales en Hispanoamérica
- Universidades más antiguas
Referencias
- ↑ López Díaz, Juan Ángel (2 de noviembre de 2023). «La primera universidad en América en 1538: otra efemérides olvidada». Asociación Española de Militares Escritores. Consultado el 2 de septiembre de 2025.
- ↑ a b Carlos Daniel Valcárcel. «Fundación de la Universidad de Santo Domingo (23 de febrero de 1558)». Consultado el 18 de agosto de 2010.
- ↑ Bibliotecas virtuales. «Santo Domingo: Las Universidades». Archivado desde el original el 8 de septiembre de 2010. Consultado el 28 de agosto de 2010.
- ↑ Grupo de arquitectura y construcción (ARQHYS) de la UASD. «Universidad Autónoma de Santo Domingo». Archivado desde el original el 1 de mayo de 2009. Consultado el 30 de agosto de 2010.
Bibliografía
- Procesos célebres del siglo XIX. (s.f.). Tomo IV. París: Imprenta de Rosa y Bouret. Edición digital publicada por la Agencia Estatal Boletín Oficial del Estado y Tribunal Supremo. Página 43.
- Rodríguez Cruz, Águeda María (1973). Historia de las universidades hispanoamericanas: período hispánico. Bogotá: Instituto Caro y Cuervo.
- Rodríguez Demorizi, Emilio (1941). Los estudios superiores en Santo Domingo durante el período colonial. Santo Domingo: Editora del Caribe.
- Rodríguez Demorizi, Emilio (1941). La Universidad de Santo Domingo y sus estatutos. Santo Domingo: Editora del Caribe.
- García Castro, María Dolores; Mediano Benito, Jesús María (2002). La legislación universitaria de España y América durante los tres primeros Borbones. Madrid: Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC).
- Conociendo un poco el origen de la UASD. Ahora. 25/11/2003; (1.332).
Enlaces externos
- Página oficial de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos
- Página oficial de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, autodenominada heredera de la Universidad de Santo Tomás de Aquino