Colegio Benigno Malo

El colegio Benigno Malo es un emblemático colegio ubicado en la ciudad de Cuenca, provincia del Azuay.

Colegio Benigno Malo
Colegio Nacional San Gregorio
Localización
Localidad Cuenca, Ecuador
Dirección Av. Fray Vicente Solano
Información
Afiliación religiosa laico
Fundación 16 de octubre de 1858
Fundador

Juan Bautista Vázquez

Presidente Francisco Robles
Apertura 16 de octubre de 1858
Autoridades
Rector Laura Serrano

Historia

En Cuenca no existía una institución de educación secundaria, hasta que en 1853, Juan Bautista Vázquez congresista por Azuay ante la Cámara de Representantes, impulsó la creación del colegio, hecho que se logró en 1858, cuando el Senado y la Cámara resolvieron establecer en la ciudad de Cuenca el colegio San Gregorio. El presidente Francisco Robles firmó el ejecútese en octubre del mismo año, creando así el primer colegio en la ciudad. En 1910, el colegio cambió de nombre a Colegio Nacional Benigno Malo, en honor a un ilustre cuencano de principios del siglo XIX.[1]

El nuevo local inicio su construcción en 1930, con un diseño neoclásico francés a cargo del arquitecto quiteño Luis Felipe Donoso Barba.

LA EXPERIMENTACIÓN EDUCATIVA Y SUS PARTICULARIDADES EN EL COLEGIO NACIONAL BENIGNO MALO Artículo elaborado por el Dr. Oswaldo Narváez Soto, Ex rector del Colegio.

El Colegio Nacional Benigno Malo, conmemora este año, el 160 aniversario de fundación, años en los cuales ha conquistado colosales victorias en todos los terrenos de la vida. Bajo la dirección de sus autoridades, el colegio llevó a cabo la experimentación educativa durante el período 1987 – 2002; y hoy está aplicando por disposición del Ministerio de Educación, el nuevo Bachillerato General Unificado. El colegio durante los años de instauración de la experimentación educativa, se transformó en una institución de calidad, con un elevado nivel académico, cultural y deportivo y con el sistema de aprendizaje más avanzado de la región. En todos estos éxitos ha desempeñado un importante papel la juventud. Tanto en la aplicación de los proyectos de experimentación educativa, como en la construcción de la tradición libertaria y la edificación de la rebeldía benignista, los jóvenes estudiantes han estado al frente de los esfuerzos para llevar a la práctica las enseñanzas y aprendizajes adquiridos. Al período entre octubre 1987 y julio 2002 de la experimentación educativa, se le recuerda como un importante momento de la gloriosa historia del Colegio Nacional Benigno Malo. Autoridades, Profesores, Personal Docente y Administrativo, Estudiantes y Padres de Familia miembros de esta Institución, construyeron y aplicaron en este período tres proyectos de experimentación educativa. El primero denominado: “INTRODUCCIÓN A LA COMPUTACIÓN, HISTORIA DE LAS CIENCIAS, FILOSOFÍA DE LAS CIENCIAS, CORRIENTES ARTÍSTICAS Y LITERARIAS EN EL BACHILLERATO EN CIENCIAS”, se aplicó durante los años lectivos 1987 – 1991. Para la implementación de este proyecto de experimentación educativa se conformó la Comisión de Experimentación Educativa con los Doctores Efraín Jara Idrovo, Oswaldo Narváez Soto y Lcdo. Enrique Mendoza Orellana, quienes elaboraron el proyecto, socializaron la propuesta, realizaron el seguimiento, control y evaluación del mismo. En el curso de la aplicación de este proyecto, la juventud benignista comprendió lo que significaba el uso de la tecnología informática; y lo que representaba ser parte del primer plantel que en el país enseñaba computación a sus estudiantes, como asignatura del currículo. Los óptimos resultados alcanzados con la implementación de este proyecto, sirvieron para que la Dirección Nacional de Planeamiento del Ministerio de Educación, incorpore al Dr. Oswaldo Narváez Soto como representante del colegio, en la Comisión Nacional integrada por profesores de algunos planteles experimentales y funcionarios de la sección de experimentación educativa del Ministerio de Educación, que se encargó de elaborar, en el período comprendido entre enero a abril de 1992, el MODELO ALTERNATIVO DE EDUCACIÓN PARA ECUADOR. Sobre la base de las cuestiones fundamentales y de principios constantes en este Modelo, la Comisión de Experimentación Educativa conformada por los licenciados: Enrique Mendoza Orellana, Abraham Jiménez Chica, César Pinos Espinoza y Dr. Oswaldo Narváez Soto, diseñó el segundo proyecto denominado: “FORMACIÓN DEL BACHILLER EN CIENCIAS EN BASE DE NIVELES (ADAPTACIÓN, ORIENTACIÓN Y ESPECIALIZACIÓN), AREAS CIENTIFICAS Y CICLOS LECTIVOS (QUIMESTRES)”, para el período Octubre 1992 – Julio 1998. La investigación y experimentación educativa orientada por este proyecto abordó los siguientes ámbitos: 1. La organización curricular por áreas científicas de estudio: Que agrupó las disciplinas en siete áreas: 1.1. Ciencias humanas, históricas o ideográficas. 1.2. Ciencias normativas, nomotéticas o sociales. 1.3. Ciencias naturales y químico biológicas. 1.4. Ciencias físicas, exactas o matemáticas. 1.5. Ciencias filosóficas y del pensamiento. 1.6. Ciencias del arte, la estética y la comunicación. 1.7. Ciencias técnicas y de la cultura física. 2. La vinculación del estudio con el trabajo dentro de las áreas científicas a través de la formación técnico – práctica: Que incorporó el aprendizaje de computación, cerámica, electricidad, artes de madera y metales, para generar actividades que respondan a los propósitos de la formación integral del bachiller y contribuyan al desarrollo de destrezas y habilidades mentales y prácticas, necesarias para el cabal desenvolvimiento de la personalidad de los estudiantes del colegio. 3. La integración del trabajo docente articulado a niveles de formación: Que atendió las necesidades de adaptación, orientación y especialización, según las especificidades del desarrollo personal biopsicológico y social de los alumnos. 4. La organización de la estructura administrativa institucional constante en el Modelo Alternativo de Educación para Ecuador: Que permitió la dotación de equipos, mobiliario y modernización de las instalaciones, pero al mismo tiempo, facilitó la determinación de procesos y la eficacia y eficiencia en el servicio administrativo. 5. La aplicación del régimen escolar por ciclos lectivos (quimestral en lugar de trimestral) y la coeducación: Que viabilizó una organización equitativa y óptima de los distributivos y horarios y el ingreso de un mayor número de mujeres en el plantel. 6. La conformación de las escuelas deportivas: Que contribuyó para alcanzar el tricampeonato general durante los años 1999 - 2000 - 2001. 7. La planificación con la participación y toma de decisiones de todos los involucrados en el quehacer educativo: Que estipuló la necesidad de elaborar por primera vez en el colegio el Plan Estratégico Institucional - P.E.I. y el Plan Operativo Anual - P.O.A., con la participación de las diversas instancias administrativas y académicas. Estos instrumentos de gestión, proporcionaron los lineamientos generales y operativos, para la realización coordinada de las tareas, actividades, proyectos, programas y planes del plantel, así como para su evaluación oportuna; y, 8. La creación de un ambiente democrático, participativo para la toma de decisiones por consenso: Que determinó la conformación al interior del colegio de la Asociación de Docentes y Personal Administrativo y de Servicios, el Club Benigno Malo, la Banda de Guerra de los exalumnos, el Frente Cultural, los Heraldos y la Banda de Guerra con la presencia de las mujeres, el Club de Periodismo, los grupos de música moderna, folclórico y de profesores, la Asamblea y Congreso General de la Asociación Nacional de Planteles Experimentales del Ecuador - ANPEE, de la Asociación de Rectores de Colegios e Instituciones Superiores del Ecuador - ARECISE, etc. etc. La aplicación del proyecto de experimentación y el desarrollo multilateral de los ámbitos mencionados líneas arriba, permitió que el colegio se ubique entre los diez mejores planteles educativos del país reconocidos por su calidad académica, mediante la concesión anual a los estudiantes sobresalientes del ciclo básico y diversificado, de la medalla de la Benemérita Sociedad Filantrópica del Guayas y del estímulo que otorga el Banco del Pichincha. En este sentido resalta con particular fuerza la coeducación, ya que en múltiples ocasiones las señoritas estudiantes recibieron la mencionada condecoración y/o estímulo. Es importante mencionar que las ideas básicas del MODELO ALTERNATIVO DE EDUCACIÓN PARA ECUADOR y los resultados alcanzados en el colegio con la implementación del proyecto de investigación y experimentación educativa denominado: “FORMACIÓN DEL BACHILLER EN CIENCIAS EN BASE DE NIVELES (ADAPTACIÓN, ORIENTACIÓN Y ESPECIALIZACIÓN), AREAS CIENTIFICAS Y CICLOS LECTIVOS (QUIMESTRES)”, sirvieron de guía para elaborar la Reforma Educativa de la Educación General Básica y del Nuevo Bachillerato General Unificado. El tercer proyecto de experimentación educativa denominado: “BACHILLERATO PREUNIVERSITARIO EN CIENCIAS BÁSICAS”, elaborado por los doctores Jaime Astudillo Romero y Oswaldo Narváez Soto, como una propuesta colectiva de innovación curricular en el bachillerato, para la RED DE COOPERACIÓN ENTRE LA UNIVERSIDAD DE CUENCA Y LOS COLEGIOS DE LA REGIÓN SUR DEL ECUADOR - REDCU, se aplicó en el ciclo diversificado del colegio, en el periodo lectivo comprendido entre octubre de 1999 a julio de 2002, para formar una promoción de bachilleres con conocimientos consistentes en las ciencias básicas: matemáticas, física, química y biología, con aptitudes y destrezas específicas en los idiomas español e inglés y lenguaje informático, óptimos aprendizajes en filosofía, cultura contemporánea, lenguaje y comunicación y adecuados desempeños en investigación y cultura física. El mencionado proyecto permitió emprender acciones conjuntas orientadas a: 1. Contribuir y elevar la calidad de la educación en los niveles medio y superior a escala regional. 2. Compartir la tarea de propiciar el desarrollo de la cultura, ciencia y tecnología para colocarlas al servicio de las necesidades y aspiraciones del ser humano; y, 3. Establecer un sistema de cooperación interactivo, permanente y estable entre los Colegios de la Región Sur del Ecuador y la Universidad de Cuenca, en torno a sus intereses y objetivos académicos y profesionales comunes. La implementación de este proyecto sirvió, en primer lugar, de instrumento para el ingreso en las facultades y carreras de la universidad de todos los bachilleres y para su educación en las nuevas concepciones actuales de la ciencia, técnica y filosofía, el trabajo y la vida. En segundo lugar, para inculcar en los jóvenes de uno y otro sexo el espíritu de solidaridad, colectividad, compañerismo, amistad sincera y de lucha para superar las dificultades. El dinamismo y el ritmo de vida determinado por este proyecto enseñaron a los bachilleres a marchar al paso de nuestro tiempo, a asimilar de manera rápida y correcta los aprendizajes de las ciencias básicas, a cuestionarse sus propias concepciones y a reafirmar gradualmente lo nuevo de las concepciones filosóficas. Lograron tener sus propios criterios, se armaron de valor para asumir los problemas de dirección con talento, acrecentando así la confianza en sus propias fuerzas para la realización de un trabajo enorme y responsable. Hoy, la mayoría de los bachilleres que se graduaron en el colegio mediante los proyectos de investigación y experimentación educativa mencionados en supra, son excelentes profesionales, líderes de las organizaciones sociales, propagandistas y activistas comunitarios reconocidos y respetados. Durante el período octubre 2003 - julio 2010, el Colegio Nacional Benigno Malo, pretendió continuar como plantel dedicado a la investigación y experimentación educativa, para lo cual intento asumir el BACHILLERATO INTERNACIONAL que la Subsecretaria Regional de Educación del Austro le asignó como responsabilidad. Lastimosamente, no fue posible la implementación del Bachillerato Internacional, porque el colegio no cumplía algunos requisitos. Por ejemplo, la de contar con autoridades titulares, que los docentes posean título de cuarto nivel y dominen un segundo idioma; y que todos los esfuerzos académicos y administrativos se concentren en la formación de exclusivamente 25 bachilleres de élite. Al mismo tiempo, la Comisión de Experimentación integrada por los señores: Hernán Ortega Yulán, Jorge Ordóñez Medina y Dr. Julio Mosquera Mosquera diseñaron el “PROYECTO DE BACHILLERATO EN CIENCIAS” y entregaron a la Subsecretaría Regional de Educación del Austro, la misma que mediante acuerdo 006 de 21 de septiembre de 2006, autoriza su aplicación a partir del año lectivo 2006 – 2007. Lamentablemente, el diseño curricular de la propuesta establecía que los estudiantes y profesores trabajen 8 horas con 20 minutos diarios, lo que generó un descontento y medidas de hecho por parte de los estudiantes y padres de familia. Por ejemplo los alumnos del ciclo básico ingresaban a clase a las 7 horas y concluían su jornada a las 15 horas con 20 minutos. A su vez los estudiantes del ciclo básico ingresaban a las 13 horas y terminaban su jornada a las 20 horas con 20 minutos, provocando un caos interno. Para atender los reclamos modificaron la malla curricular, intensidad horaria, distributivo docente, sistema de evaluación y del mencionado proyecto quedo vigente muy poco. Luego en marzo de 2008, la Dirección Nacional de Planeamiento, indicó que “el Proyecto de Bachillerato en Ciencias, no tiene diseño experimental y determinaron el plazo de 3 meses, para que la Comisión de Experimentación elabore un nuevo proyecto”. Las autoridades encargadas del plantel, en el afán de cumplir las disposiciones de la Dirección Nacional de Planeamiento, reestructuraron la Comisión de Experimentación y concedieron “un plazo de 90 días contados a partir de la fecha (mayo del 2008) para que presenten el proyecto experimental”. La Comisión de Experimentación, cumpliendo los plazos establecidos, entregó el proyecto denominado: “INCIDENCIA DE UNA PROPUESTA CURRICULAR, LOS EJES Y CRÉDITOS ACADÉMICOS EN EL RENDIMIENTO ESCOLAR”, para conocimiento y socialización entre los docentes, estudiantes y padres de familia y trámites posteriores en la Dirección Nacional de Planeamiento, el mencionado proyecto de experimentación educativa, no fue posible aplicar por las contradicciones entre las autoridades no titulares encargadas de dirigir el colegio; y la supresión de la Dirección Nacional de Planeamiento, organismo responsable de aprobar su vigencia y ejecución. El Ministerio de Educación traslada la responsabilidad de conocer y aprobar los proyectos de experimentación educativa a la Dirección Nacional de Currículo. Esta entidad administrativa, en uso de sus nuevas atribuciones legales, solicita que el colegio presente un nuevo proyecto. La Comisión de Investigación y Experimentación Educativa integrada por los Doctores Raúl Córdova León, Oswaldo Narváez Soto, Julio Mosquera Mosquera y Licenciada Bertha Morán Genovés diseñó y elaboró el “PROYECTO DE BACHILLERATO GENERAL EN CIENCIAS CON FUNDAMENTO EN EL ENFOQUE SOCIOCRITICO” que fue presentado en julio de 2010, para que la Junta General de Directivos y Profesores, Asamblea General de Estudiantes, Asamblea General de Padres de Familia y Asamblea del Personal Administrativo y de Servicios, conozcan y formulen las recomendaciones respectivas. Estas instancias de dirección y cogobierno, dieron el aval y recomendaron los trámites subsiguientes ante la Dirección Provincial de Educación y Subsecretaría Regional de Educación del Austro, organismos que aprobaron su ejecución y remitieron a la Dirección Nacional de Currículo para que emita el respectivo decreto. Desgraciadamente, el 13 de diciembre de 2010, el Gerente del Nuevo Bachillerato Ecuatoriano, ratificó la decisión del gobierno de desaparecer los colegios experimentales y eliminar el funcional adicional del 10% que percibían los docentes de los planteles experimentales por la homologación salarial. Esta decisión se hizo realidad el 11 de enero de 2011, con la vigencia de la nueva Ley Orgánica de Educación Intercultural. Finalmente si echamos una mirada, hoy que conmemoramos los 160 años de vida institucional, al camino recorrido por la investigación y experimentación educativa en el colegio, podemos deducir fácilmente que la calidad educativa, reconocimiento social, desarrollo en el deporte, arte y cultura en general, es el resultado de la persistencia en la aplicación de los proyectos educativos, en concordancia con la trayectoria histórica y prestigio alcanzado como primer establecimiento educativo del sur del país.

¿CÓMO ALCANZAMOS EL TRICAMPEONATO GENERAL EN LAS JORNADAS DEPORTIVAS DE LA FEDERACIÓN DEPORTIVA ESTUDIANTIL DEL AZUAY?

Autor del artículo: Dr. Oswaldo Narváez Soto, Exrector del Colegio Nacional Benigno Malo.

ANTECEDENTES: A finales de la década de los años ochenta, el colegio Benigno Malo fue sancionado por tres ocasiones: la primera sanción, impedía que el plantel participe en las jornadas por dos años, debido al acto de irrespeto al Himno Nacional de Ecuador que fue cantado de manera precipitada, sin armonía, ritmo y desacompasado. La segunda sanción de dos años por un comportamiento inadecuado en los graderíos del estadio al dar la espalda a las delegaciones de otros planteles que desfilaban por la pista atlética para ubicarse en la cancha, previo al inicio del acto inaugural. La tercera sanción al participar como espectadores de una riña en el Parque de la Madre que culminó cuando un joven fue acuchillado y herido y la prensa endosó al colegio la responsabilidad. Los enemigos gratuitos de nuestra institución pidieron la separación definitiva de las jornadas deportivas y los más generosos de que se aplique una sanción ejemplar que prohíba la presencia del colegio en las competencias deportivas por el lapso de cinco años. Las comisiones que investigaron los hechos receptaron los testimonios de algunos inspectores y estudiantes del colegio, quienes justificaron que, en el primer caso, el canto del himno nacional se produjo sin la armonía, ritmo y vocalización debida, por la mala acústica en el estadio y el intenso viento que llevaba la música de la banda hacia otros lados. En el segundo hecho, se informó que algunos infiltrados lideraron el acto de indisciplina y lamentablemente los estudiantes imitaron su comportamiento y no fue posible identificar a los responsables, ni impedirlo porque todos los estudiantes del colegio que participaron en la inauguración de las jornadas deportivas no portaban uniforme. En el tercer caso, el colegio apeló y no avanzó el proceso de sanción porque la prensa se disculpó, pues la riña se dio entre delincuentes comunes que no pertenecían a ninguna institución educativa. Lamentablemente la dos primeras sanciones se mantuvieron y el colegio no pudo participar por el lapso de cuatro años en las jornadas deportivas. NUEVAS AUTORIDADES DEL COLEGIO: El 9 de julio de 1992, mediante concurso de méritos y oposición, obtuve el cargo de rector del colegio y al asumir funciones, una de las primeras actividades fue la de solicitar un informe de resultados a todos los responsables de las instancias administrativas y académicas de la institución, para establecer un diagnóstico de la situación, debido a que el gobierno del Arq. Sixto Duran Ballen, mediante reformas y decretos, eliminó del presupuesto de todos los colegios del país, la asignación de los recursos para gastos de inversión y recortó en un 75% las asignaciones para gastos administrativos. Estas medidas inconsultas, resultaron un duro golpe para la educación del Ecuador y sin dinero la gestión y dirección del plantel se convirtió en una tarea muy difícil. Sin embargo, con la creatividad e ímpetu que nos daba la juventud, comenzamos a liderar los cambios necesarios y a dirigir el colegio en medio de las carencias. En respuesta a la situación descrita, elaboramos la Planificación Institucional, un nuevo Proyecto de Experimentación Educativa, descentralizamos la gestión e incorporamos paulatinamente a los docentes, personal administrativo, padres de familia y alumnos en los cambios e innovaciones administrativas, académicas y cumplimiento de nuevas metas y objetivos. CONCEPCIONES DE NUESTRA GESTIÓN: Nuestra gestión se fundamentó en las siguientes concepciones: “1.- La exigencia de formar bachilleres en ciencias con un alto nivel de conocimientos académicos, a través de metodologías de enseñanza que faciliten al aprendizaje activo y crítico. 2.- La necesidad de que los profesores tengan menos horas clase para que realicen otro tipo de trabajo colectivo mediante la integración real de programas, la investigación, elaboración de material de apoyo, cuestionarios de evaluación, etc. según sus aptitudes, vocación y preparación académica. 3.- La firme convicción de respeto a las leyes y normas vigentes para descentralizar funciones, compartir responsabilidades, ubicar al personal administrativo en los puestos que determina su nombramiento y experiencia. 4.- La exigencia de organizar la estructura administrativa institucional, según los nuevos requerimientos de la investigación y experimentación educativa que aplica el plantel. 5.- La urgencia de actualizar el trabajo administrativo y el proceso enseñanza-aprendizaje, incorporando la informática y todos los medios audiovisuales. 6.- La convicción profundamente democrática de respeto a los demás, a la función crítica y autocrítica de los señores profesores, a las posibilidades de creatividad de los alumnos y, de manera especial, al proceso de discusión y diálogo con todos los integrantes de la comunidad educativa, para desarrollar y configurar la conciencia e identidad frente a los problemas académico-administrativos y de compromisos sociales”. (Oswaldo Narváez, Informe de labores del periodo 1992 – 1993, pág. 2). 7.- Solicitar la revisión de las sanciones al colegio que nos impedían participar en las Jornadas Deportivas Estudiantiles. 8.- Crear las Escuelas Deportivas para formar a los niños y adolescentes en la práctica de algún deporte y a los que se destaquen, incorporarlos en los equipos que competirían en representación del colegio. ACTIVIDADES REALIZADAS: Para hacer realidad las concepciones 2, 7 y 8 enfrentamos una serie de dificultades, en primer lugar, la oposición tenaz de la Dirección Provincial de Educación a la disminución de las horas clase, en segundo lugar, el 11 de septiembre de 1992 solicitamos a la Federación Deportiva Estudiantil se levante la sanción impuesta (Vid. Diario El Tiempo Pág. 12) obteniendo como respuesta la negativa de las autoridades del deporte estudiantil a tramitar nuestra apelación a las sanciones y, finalmente la más grave, la carencia total de recursos para financiar el deporte en el colegio. No nos amedrentamos y con la iniciativa del Departamento de Educación Física y la ayuda de la empresa privada, exalumnos como el general Juan Méndez y el Comité de Padres de familia, comenzamos a arreglar la cancha de futbol, las instalaciones de la piscina y coliseo, la fosa de salto largo, paralelas, cabo comando, adquirimos los implementos deportivos, etc. Al mismo tiempo, el rectorado, amparado en el carácter experimental del plantel, decidió dividir las 20 horas de clase de educación física de la siguiente manera: 10 horas para que los docentes del área de cultura física impartan clase y 10 horas para que dediquen a la conformación de las escuelas deportivas. De igual manera, se disminuyó las horas clase a un grupo numeroso de docentes de las otras áreas, quienes se dedicaron a la elaboración de textos de apoyo, nuevas formas de planificación académica, diseño de cuestionarios de evaluación, proyectos de aula, construcción de metodologías de enseñanza, procesos de capacitación, guía y tutoría de actividades relacionadas con la cultura, etc. que en los años subsiguientes arrojaron excelentes resultados académicos y por supuesto el reconocimiento del Colegio Nacional Benigno Malo como uno de los mejores planteles de educación media del país. RETORNO A LAS COMPETENCIAS DEPORTIVAS INTERCOLEGIALES: Con el cambio de autoridades en la Federación Deportiva estudiantil, el rectorado logró la suspensión de la sanción y en consecuencia nuestro retorno a las competencias deportivas intercolegiales. Para ello, iniciamos un proceso de concienciación en los estudiantes sobre la manera de comportarse; la asistencia a los escenarios deportivos de los estudiantes correctamente uniformados; la presencia en los graderíos del estadio de las autoridades y todos los profesores del plantel en el acto inaugural; el control de los inspectores y profesores guías a los estudiantes de los cursos que asisten como espectadores y barras a los partidos en los que compita el colegio; el financiamiento de refrigerios para los deportistas durante los entrenamientos; la oportuna adquisición de los uniformes e implementos deportivos, etc. Para el retorno a las competencias deportivas, también planificamos con la Comisión de Sociales la adquisición de juegos pirotécnicos: un castillo con el escudo del colegio, globos de papel con leyendas y símbolos del plantel, cohetes, bombas con los colores de la institución. También, el Área de Cultura Física, seleccionó un grupo de gimnastas y zanqueros que fueron muy aplaudidos por los estudiantes de los colegios que asistieron al acto inaugural. Diario El Mercurio colocó una foto de las madrinas en su primera plana con un elogioso comentario hacia el colegio, a su vez Diario El Tiempo, ponderó el comportamiento de los alumnos, destacó la forma como retornamos a las jornadas deportivas y describió de manera objetiva al colegio como modelo de iniciativa y creatividad para brindar una verdadera fiesta deportiva. Nuestra participación en las jornadas deportivas estudiantiles del año lectivo 1994 fue al principio en pocas disciplinas, destacándose el fútbol, atletismo, judo, halterofilia y lucha olímpica, en las que obtuvimos algunos triunfos; por lo general, un tercero y cuarto puesto. Fue fundamental el apoyo económico de: Filanbanco, Embotelladora y Procesadora del Sur - Emprosur y el Comité Central de Padres de Familia para contratar entrenadores, adquirir los uniformes deportivos para los estudiantes y algunos suministros y materiales necesarios para la práctica de estas disciplinas deportivas. En las participaciones subsiguientes, se incorporaron otras disciplinas como el básquet, natación, gimnasia olímpica, tenis de mesa, ajedrez, tae kwon do. Es digno de destacar que los deportistas de estas disciplinas fueron formados en las escuelas deportivas que comenzaron a otorgar al colegio sendos triunfos como campeones y vicecampeones, En una de las disciplinas que no pudimos destacarnos fue el básquet, a pesar de los esfuerzos de un excelente deportista y entrenador como Casimiro Torres y sus ayudantes: Jorge Pesantez y Hugo Peláez. Sin embargo, se puede remarcar el entusiasmo y dedicación del equipo en cada uno de los partidos disputados. El funcionamiento de las Escuelas Deportivas no fue una tarea fácil, por la carencia total de recursos económicos, materiales y de infraestructura. La sanción que impidió nuestra participación en las jornadas deportivas estudiantiles afectó totalmente la conformación de equipos, no contábamos con deportistas formados o con entrenamiento planificado y permanente. LAS ESCUELAS DEPORTIVAS: Comenzamos la conformación de las escuelas deportivas con los niños más prometedores que poseían destrezas especiales para la práctica de algún deporte. Los padres de los niños que integraban las escuelas deportivas demostraron un inmenso cariño y compromiso con el colegio, primero financiando la presencia en el plantel de los niños en doble jornada. Por la mañana asistían de 8 a 10 horas a los cursos de formación y entrenamiento en las escuelas deportivas y por la tarde las clases de la jornada vespertina eran de 13 a 18 horas. Las escuelas que comenzaron a funcionar fueron con deportistas de la categoría inferior. De las categorías intermedia y superior contábamos con unos pocos deportistas que debían asistir a los entrenamientos en horas de la tarde de 15 a 17 horas, luego de la jornada académica regular de 7 a 13 horas, muy pocos lo hacían por la desmotivación que implicaba entrenar y no tener la seguridad de competir, debido a la vigencia de la sanción impuesta. Las escuelas deportivas con las que iniciamos la formación de los niños más prometedores fueron las de fútbol, básquet, vóley internacional, natación, gimnasia olímpica, judo, tae kwon do, tenis de mesa, atletismo, ajedrez, karate y tenis. Los recursos económicos y materiales lo obtuvimos mediante convenios firmados con Filanbanco y Emprosur. Con Filanbanco los compromisos fueron obtener en donación balones de fútbol, básquet y vóley internacional, redes para los arcos de fútbol y los parantes de vóley y un apoyo económico, siempre y cuando, nuestros estudiantes de los quintos y sextos cursos participen en la toma de datos de exit poll o aplicación de encuestas. Con la Embotelladora y Procesadora del Sur - Emprosur la condición para recibir una ayuda económica y la donación de los uniformes completos, exigía que en los bares se ofrezcan y vendan exclusivamente sus productos de refrescos como: coca cola, sprite y fanta. Para realizar algunos arreglos de la infraestructura debo destacar la generosa contribución del General Juan Méndez, distinguido exalumno del plantel, quien envió un contingente de conscriptos para resembrar el césped de la cancha de futbol, arreglar la piscina e instalaciones del colegio, (fosa destinada para la práctica de salto largo, paralelas, cabo comando, etc.). El Dr. Fabian Cueva, exalumno del colegio y gerente del Banco del Pichincha, por gestión del rectorado, entregó en donación desde el año lectivo 1996-1997 libretas de ahorro para los mejores estudiantes, abanderados, mejor egresado y deportista del plantel y financió la dotación de cien uniformes deportivos interiores (camiseta, pantaloneta, polines). El Amistad Club, a través de un convenio con el rectorado se encargó del arreglo anual del coliseo para utilizarlo en el mundialito de los pobres. En virtud de que las autoridades del colegio facilitamos el coliseo para los entrenamientos de los equipos de básquet y vóley internacional que asistieron a los juegos ODESUR, el Comité Olímpico Ecuatoriano y la Federación Deportiva del Azuay, reconstruyeron totalmente la cancha, graderíos, luminarias, servicios higiénicos, duchas, escenario y cabinas de trasmisión del coliseo, inclusive lo acondicionaron para que sirva a la práctica de cuatro deportes: futbol sala, vóley internacional, ecuavoley y básquet. El rectorado, mediante reunión con las Directivas de los Comités de Padres de Familia, obtuvo el compromiso de establecer en los valores de la matrícula una cuota destinada para el deporte del colegio. Estos recursos fueron manejados conjuntamente por el presidente del comité de padres de familia y el colector/colectora, los cuales, gracias a su ejecución planificada sirvieron para contratar entrenadores, brindar refrigerios a los deportistas, contratar una buseta para la movilización de los deportistas a las canchas de entrenamiento y competencias, financiar la atención médica y tratamiento de algunos deportistas lesionados, etc. ELTRICAMPEONATO GENERAL: Luego de nuestro retorno a las competencias intercolegiales, en los años lectivos 1995, 1996 y 1997, las escuelas deportivas del colegio comenzaron a cosechar triunfos en la categoría inferior e intermedia, obteniendo sendos campeonatos y vicecampeonatos en fútbol infantil, gimnasia olímpica, judo, atletismo, campo traviesa, ajedrez, lucha olímpica y halterofilia. Estos triunfos nos llenaron de orgullo, pero al mismo tiempo, tuvimos que soportar grandes e innumerables obstáculos y dificultades provocados por la crisis económica, desatención presupuestaria y el incremento de necesidades materiales generadas por el multilateral desarrollo de la experimentación educativa y el deporte. Por ejemplo, cuando se realizaban las competencias, se requería dinero para financiar los refrigerios, almuerzos, meriendas, medicamentos y transporte para los estudiantes integrantes de los equipos, profesores de cultura física, entrenadores y ayudantes. También necesitábamos adquirir chalecos, conos, protectores y rodilleras de tae kwon do, cloro y combustible para la piscina y otros implementos deportivos, además se solicitaba la construcción de la cancha de ecuavoley y que se destine un aula para las prácticas de tae kwon do en cuyas paredes se debían colocar espejos. El dinero para satisfacer estas necesidades lo obtuvimos con actividades de autogestión y por el aporte de la empresa privada y comité central de padres de familia. El primer campeonato general lo obtuvimos en el año lectivo 1998-1999, el segundo campeonato general el año lectivo 1999-2000 y el tercer campeonato general el año lectivo 2000-2001. A la luz de estos hechos concretos -el tricampeonato general- ustedes pueden juzgar nuestra actitud justa en la aplicación del proyecto de experimentación educativa, los grandes esfuerzos por dotar de recursos humanos y materiales, el deseo y voluntad para consolidar el deporte y relievar la trayectoria e historia del Colegio Nacional Benigno Malo. Las disciplinas en las que competimos en las categorías inferior, intermedia y superior para obtener el tricampeonato general fueron el fútbol, atletismo, judo, halterofilia, lucha olímpica, básquet, vóley internacional, natación, gimnasia olímpica, karate, tenis de mesa, ajedrez, tae kwon do, campo traviesa, ecuavoley, tenis de campo. Inclusive el equipo de futbol sub-14 del colegio, por decisión de la Federación Deportiva del Azuay sirvió como base para integrar la selección que representó a la provincia en el campeonato nacional de futbol. Algunos integrantes de la escuela de atletismo, como parte de su entrenamiento, participaron en la competencia atlética Ultimas Noticias con el auspicio económico de la institución. Cuando en el año lectivo 1992-1993 creamos las escuelas deportivas, estuvimos conscientes de que significaba un paso decisivo e histórico en la proyección del deporte en el Colegio Nacional Benigno Malo. Todas las victorias alcanzadas en el deporte, cultura y educación se deben a nuestros alumnos, a su sacrificio, a su cohesión y unidad, a su fidelidad a los principios, tradición e historia del plantel; se deben también a nuestro honesto y laborioso personal docente del área de cultura física y al ferviente y creativo trabajo de los entrenadores contratados. Los profesores de cultura física, entrenadores y ayudantes bajo la dirección del rectorado cumplieron creativamente las tareas fundamentales para el desarrollo de la cultura, educación y deporte fijadas en la Planificación Estratégica. Durante los nueve años de vigencia de las escuelas deportivas se consolidó el trabajo del Departamento de Cultura Física en todas las ramas del deporte, se perfeccionó la base material y técnica de las instalaciones deportivas y gracias a la firme voluntad, ingenio y habilidad de los estudiantes deportistas, a los siete años de nuestro retorno a las competencias deportivas de la Federación Deportiva Estudiantil, culminamos con la obtención del tricampeonato general, título que nos llenó de orgullo, vitalidad y dinamismo por los éxitos alcanzados y fortaleció nuestra fe inconmovible en el futuro. GESTORES DE LA CONSECUSIÓN DEL TRICAMPEONATO GENERAL: Directores del Departamento de Cultura Física: Edgar Varela Ayala, Marco Zúñiga Rocano, Casimiro Torres, Julio Flores, Rodrigo Crespo, Jorge Pesantez y Hugo Peláez Novillo, quienes durante los 9 años de mi gestión al frente del rectorado, colaboraron decididamente. Mención aparte merece el Lcdo. Edgar Varela Ayala, quien fue el gestor de las escuelas deportivas y en tres periodos ejerció la dirección del Departamento de Cultura Física. Profesores entrenadores de las escuelas deportivas: Edgar Varela Ayala (natación y gimnasia olímpica), Marco Zúñiga Rocano (fútbol), Julio Flores (atletismo y campo traviesa), Rodrigo Crespo (vóley internacional y ecuavoley), Casimiro Torres (básquet), Rodrigo Carpio Cordero (ajedrez). Profesores entrenadores: Jorge Pesantez y Hugo Peláez Novillo (básquet), Juan Avilés (karate) Entrenadores contratados: Gonzalo Montesinos Calderón (tenis de mesa y tenis de campo), Jhon Sitchel (halterofilia), Geovanny Angamarca (judo y lucha olímpica), Eddy Guerrero (karate y tae kwon do), Javier Solís (fútbol), Paúl Vélez (fútbol), Oswaldo Durán (vóley internacional), Gustavo Wilches (fútbol). AGRADECIMIENTOS: A más de las personas mencionadas en el presente artículo, que fueron las gestoras en la consecución de importantes logros deportivos en el colegio Benigno Malo, merecen un especial reconocimiento los alumnos que gracias a su constancia y disciplina cosecharon varias medallas y ubicaron al plantel en los primeros lugares en varias disciplinas deportivas, lo cual nos permitió por primera vez en la historia del colegio obtener el tricampeonato general, que nos llenó de orgullo no únicamente a sus entrenadores y sus familias sino a toda la comunidad educativa benignista. Es importante que las siguientes generaciones continúen con el legado de sus compañeros y sigan destacándose en el ámbito deportivo y educativo porque únicamente de esa manera podremos aspirar a un mejor futuro en nuestro país.

LA BANDA DE GUERRA DEL COLEGIO NACIONAL BENIGNO MALO

Autor del artículo: Dr. Oswaldo Narváez Soto, exrector del colegio.

ANTECEDENTES: Según testimonios de distinguidos exalumnos que participaron en la conmemoración del centenario de fundación del colegio, la banda de guerra se conformó en 1963, para presidir el desfile de las promociones de exalumnos, realizado el 30 de enero de 1964. En sus inicios, la banda de guerra estuvo integrada por 12 estudiantes, de los cuales 6 tocaban los tambores y 6 interpretaban las trompetas. (vid. Página 38 del Libro de Oro). En el pie de foto se menciona: “La primera Banda de Guerra del Colegio “Benigno Malo”, cuando los muchachos estrenaron su tradicional uniforme tan querido en la ciudad”. De la misma manera, en las páginas 308 y 427 se destaca la gallardía y elegancia del cachiporrero y se menciona que “La Banda de Guerra del Colegio “Benigno Malo” inicia el desfile de los Bachilleres. Al fondo puede verse las distintas promociones desfilantes” (Sic.). El 3 de noviembre de 1975 cuando nuestro país estuvo gobernado por el General Guillermo Rodríguez Lara, la banda de guerra del colegio fue protagonista de un acto aplaudido por el pueblo cuencano, al no rendir los honores de estilo al gobernante y autoridades ubicadas en el escenario, sino que les dio la espalda, entonando el toro barroso y rindiendo honores al pueblo asistente al evento. La prensa resaltaba que: “la banda de guerra del Colegio Benigno Malo que por tradición cierra el desfile cívico dio la espalda al dictador y rindió honores al pueblo”, inclusive mencionaba que: “la acción de entonar la canción popular el toro barroso fue iniciativa de los integrantes de la banda de guerra”. Este acto fue noticia de los periódicos y revistas del país y sirvió para reafirmar lo que se ha denominado la “rebeldía benignista”. Diario El Mercurio, el martes 4 de noviembre de 1975, en la página seis, columnas sexta, séptima y octava, entre otras opiniones, indica lo siguiente: “Los alumnos del Colegio Nacional Benigno Malo no rindieron los honores al Jefe de Estado sino que los integrantes de la banda de guerra y los jóvenes desfilantes dieron la espalda a la tribuna en donde estaban las autoridades, jefes militares e invitados especiales y miraron hacia el público. Todos los estudiantes de la delegación del Benigno Malo coincidieron en esta actitud”. Por supuesto, la reacción del gobierno fue radical: clausuró temporalmente al colegio, conminó al rector, bajo la amenaza de destituirle, que: “de manera inmediata proceda a entregar la lista de los integrantes de la banda de guerra a quienes se les debía imponer como sanción la expulsión del plantel”. El Dr. Guillermo Torres Ochoa, en ese momento rector del plantel, en una actitud que le honra, se negó rotundamente a proporcionar la lista, peor sancionar a los estudiantes y presentó la renuncia al cargo. Como digresión indicaré que la denominada rebeldía benignista se configuró con hechos trascendentes que tuvo como actores principales a sus estudiantes y a determinadas autoridades del colegio. Por información del Dr. Miguel Diaz Cueva, se conoce que el primer hecho que originó la citada rebeldía aconteció en 1935, cuando el gobernador de la provincia del Azuay pretendió entregar el edificio del colegio para que sirva como cuartel de los militares, inclusive un grupo de soldados se radicó en el establecimiento. Los estudiantes conocedores de esta arbitrariedad tomaron sus pupitres del edificio ubicado en la plazoleta Santo Domingo que ocupaba el colegio, y en tumulto, con valentía y decisión llegaron al edificio actual de la avenida Solano y los desalojaron. Otro de los íconos de la rebeldía se manifestó cuando desde el 9 de enero de 1997 hasta el 6 de febrero de 1997, los estudiantes mantuvieron durante un mes protestas contra el gobierno grotesco de Abdalá Bucaram y, con su rector a la cabeza, lograron que el pueblo cuencano y ecuatoriano se sume al descontento y se lo expulse del gobierno. Es importante señalar que los alumnos asistían a clase en jornadas y luego lideraban las protestas callejeras contra el alza de los precios del gas doméstico, actitudes histriónicas del presidente y corrupción de su hijo y colaboradores en la aduana de Guayaquil. Por supuesto hay otros ejemplos singulares de la rebeldía benignista que se caracteriza por luchar contra la injusticia, explotación, corrupción, desgobierno y medidas económicas contrarias a la salud, educación y bienestar del pueblo. Pero es totalmente opuesta a los actos de patanería, vandalismo, comportamientos irreflexivos. Todo lo contrario, la rebeldía benignista, siempre se caracteriza por cumplir la consigna de Juan Montalvo: “Hay de aquellos pueblos donde la juventud no haga temblar al tirano”. EXPERIENCIAS CON LA BANDA DE GUERRA DEL COLEGIO: Inicié los contactos con los integrantes de la banda de guerra del colegio Benigno Malo, en octubre de 1978, cuando ingresé como profesor mediante concurso de méritos y oposición. En ese tiempo ejercía el rectorado el Dr. Luis Sánchez Valdivieso y las funciones de Inspector General el señor Hernán Ortega Yulán, quienes me encargaron las funciones de inspector de tramo en los cuartos cursos físico matemáticos y la docencia en Historia de la Filosofía en la especialidad de sociales e investigación en los cuartos cursos de la especialidad físico matemáticos. Recuerdo que los primeros días de cada mes de octubre, comenzaba el ritual de selección de los integrantes de la banda de guerra, quienes debían cumplir con los siguientes requisitos: tener una estatura superior a un metro sesenta, cuerpo atlético, bien parecido, marchar mejor que los militares y someterse a una prueba con el señor Diego Silva, director de la banda de guerra, quien a los seleccionados por los inspectores de tramo e inspector general, solicitaba, toquen el tambor, luego el granadero y finalmente la trompeta. Muchos no poseían aptitudes para la interpretación de los instrumentos y ni las destrezas para marchar con gallardía e inmediatamente se los descartaba para integrar la banda que en ese tiempo ya contaba con 50 integrantes. La mayoría de ellos pertenecían a los sextos cursos y al graduarse como bachilleres seguían sus estudios universitarios, se alejaban del colegio y la banda de guerra se desmembraba, quedaban como integrantes los alumnos de quinto curso, por lo tanto, el proceso de recambio e incorporación de nuevos miembros se realizaba con alumnos de los cuartos cursos, a quienes los antiguos integrantes que permanecían en la banda con la dirección del profesor de música, tenían que enseñarles a interpretar las cinco marchas con los tambores, granaderos y trompetas y sincronizar los pasos y movimientos de las manos. Luego del proceso de selección, se iniciaban los ensayos para participar en el desfile cívico del 12 de abril, fecha de conmemoración de la fundación de la ciudad de Cuenca; y muy esporádicamente en el desfile cívico militar del 3 de noviembre, que celebra la independencia de la ciudad. Es digno de destacar que la música (resonancia de las trompetas, redoble de los tambores y sonido contrastante de los granaderos) y marchas lentas en armonía con los movimientos de las manos, fue creada por el señor Diego Silva, quien siempre recalcó que las marchas que tocaba la banda de guerra del colegio, es una amalgama realizada por él de algunas canciones de los Beatles, tan de moda en ese entonces. ARQUETIPOS Y TRADICIONES: En los años subsiguientes de mi función como inspector de tramo se cambiaron las autoridades del plantel y, en consecuencia, el ritual de selección de los integrantes de la banda de guerra soportó algunas modificaciones. Por ejemplo, cuando asume el rectorado el Dr. Benjamín de la Cadena y como inspector general el Lcdo. Efrén Vallejo Picón, se encarga de la dirección de la banda de guerra el Dr. Edmundo Rivera P. quienes democratizan el ingreso a la banda, ya no se exigió la estatura de mínimo 1 metro 60 centímetros porque los alumnos seleccionados, por lo general, adolescentes estaban en pleno desarrollo de sus facultades físicas e intelectuales. El requisito fundamental, según el inspector general, era de que el alumno no “sea cuchi oreja”- (incapacidad para apreciar el ritmo y armonía de la música); y tampoco era indispensable cumplir con ciertos atributos físicos como el color de ojos y cabello. Es importante mencionar que por disposición del señor rector Dr. Benjamín de la Cadena, tuve a mi cargo las gestiones para que la banda de guerra del colegio participe en el desfile de la avenida de los Shyris en Quito, con motivo de las fiestas cívicas del 6 de diciembre de 1980. Su presencia se dio gracias al apoyo de algunos concejales del Municipio de Quito, amigos del suscrito, y del señor prefecto de ese entonces, el Dr. Patricio Romero Barberis. Por supuesto, que la gallardía de los jóvenes, el sonido armonioso, la marcha lenta impactó y asombró a la ciudadanía quiteña que de manera espontánea elogió con aplausos su presencia. También, considero importante consignar que el doctor Benjamín de la Cadena, firmó el pacto de no agresión con los rectores de los colegios Rafael Borja, Hermano Miguel - La Salle y Técnico Salesiano, con lo cual puso punto final a las peleas y riñas que sucedían al finalizar el desfile, especialmente en la Calle Sucre, frente al Palacio de Justicia. Recuerdo que alguna vez pregunté a los estudiantes las razones o causas que generaban los enfrentamientos, y los testimonios que obtuve fueron risibles: unos indicaban que era un tongo, otros que respondían a la provocación, la mayoría indicaba que por tradición para que la prensa tenga algo que decir, y unos pocos que efectivamente peleaban a trompones porque alguien del otro colegio le había quitado a la novia o para castigar a quien traicionó su confianza. Lo singular era que muchos de los revoltosos eran parientes, amigos de jorga, vecinos del barrio, solo que matriculados en los otros colegios mencionados. En el rectorado del Dr. Raúl Córdova León y como Inspector General el señor Romeo Moscoso, el ritual de selección de los integrantes tuvo algunas modificaciones. Por ejemplo, se incorpora un coordinador a la banda de guerra, debido a que el director, era por lo general uno de los profesores de música del plantel que trabajaba en el ciclo básico, y no conocía a todos los alumnos del ciclo diversificado que integraban la banda de guerra. Esto hacía que no pueda controlar la disciplina y comportamiento de los alumnos. También se adopta la comisión de servicio para los alumnos de la banda de guerra que consistía en no tener falta a clases mientras asistían a los ensayos, pero se atrasaban en la enseñanza aprendizaje de los contenidos y se afectaba su rendimiento académico. Entre los coordinadores que recuerdo están los señores: Washington Noroña, Arturo Palacios y Luis Coronel quienes incorporaron a la presentación de la banda: una singular manera de marchar arrastrando uno de los pies, la presencia de los heraldos, la participación en el desfile de tres alumnos montados a caballo, y el golpe intenso en los tambores y granaderos hasta el extremo de romper los parches que descompasaba el ritmo de las marchas y lamentablemente concluía en un ruido sin sentido de estos instrumentos. En mi rectorado y la gestión de Rafael Rubio Genovés como inspector general, el ritual de selección de los integrantes de la banda de guerra se sujetó a determinados principios del modelo alternativo de educación y proyecto de experimentación educativa. En estos documentos, se destaca la coeducación, la calidad de la enseñanza, el respeto a los derechos de los niños y jóvenes y principalmente el cumplimiento de sus obligaciones como estudiantes. Con fundamento en estos principios, concebimos que la banda de guerra es la carta de presentación del colegio, son los embajadores de la institución. Además, resaltamos que es un honor ser integrante de la banda de guerra y que en tal virtud deben participar los mejores estudiantes, gimnastas, músicos y deportistas. Para no afectar el proceso enseñanza aprendizaje y desempeño académico de los estudiantes integrantes de la banda, los ensayos se realizaban fuera de las horas de clase, bajo la dirección del profesor de música del colegio Dr. Jaime Abad Calvo, la colaboración del señor Remigio Abad Calvo, excelente músico y director del conjunto de música moderna y folclórica del colegio y la presencia de los inspectores del ciclo diversificado. Reincorporamos la marcha lenta tradicional, mejoramos la sincronización de los movimientos de las manos, compramos nuevos instrumentos, casacas del uniforme de la banda de guerra, correas tipo portaestandarte para los abanderados, nuevas banderas del Ecuador, Cuenca y del colegio, cinturones, polainas, parches de tambor y granaderos, cimbras y tornillos de tambor y, por primera, vez los integrantes de la banda de guerra sumaban un total de 120 integrantes que, adicionados a los tres abanderados, seis escoltas de los abanderados, tres cachiporreros, cuatro gimnastas, directores de las escuadras y 40 estudiantes mujeres que participaban correctamente uniformadas en cuatro escuadras de diez alumnas cada una, daba un total de 180 estudiantes representantes del colegio en los desfiles. Su presencia impactaba y como era tradicional cerraba el acto cívico y la ciudadanía que asistía a observar el desfile esperaba que llegue el colegio para aplaudir su gallardía, excelente interpretación e imponente participación. En este período, en todas partes se comentaba la participación de la banda de guerra, deportistas y alumnos en los eventos cívicos, competencias intercolegiales, académicas, etc. El colegio Benigno Malo gozó de un gran prestigio nacional y contaba con numerosos amigos y simpatizantes por dondequiera en el país, debido a que el nivel académico, el deporte y la cultura adquirieron un vasto y multilateral desarrollo. En consecuencia, la banda de guerra, en el año lectivo 1993 – 1994, atendiendo la invitación de las muy ilustres municipalidades de Riobamba y Oña participó en los desfiles cívicos con notable éxito. En los años subsiguientes, la banda de guerra estuvo en la apertura de los juegos deportivos ODESUR, realizada el 21 de octubre de 1998, o en eventos de conmemoración de los aniversarios de fundación de colegios fraternos e instituciones de gobierno local o provincial. Además, debo indicar que desde mi rectorado se propició la incorporación de las alumnas del plantel en la banda de guerra, tocando las liras, instrumentos que son parte de la totalidad de la banda. Lamentablemente, en esa época, existió oposición de los alumnos bajo la afirmación de que la banda debía ser solo de hombres, y que las señoritas no coordinaban los movimientos de las marchas, ni armonizaban su interpretación con los otros instrumentos y pronto desistieron de integrarlas en la banda de guerra del colegio. Finalmente, en el período de mi rectorado, luego del desfile en conmemoración de los 135 años de existencia del plantel, con la organización de exalumnos, comité de festejos y asociación de personal docente y administrativo, se realizó con mucho éxito el Encuentro de la Confraternidad Benignista. En este evento, surgió la idea de conformar la banda de guerra de exalumnos, iniciativa a la que apoyé decididamente. Su conformación se hizo realidad en los años subsiguientes, especialmente con ocasión de celebrar los 140 años de existencia, y desde entonces nos proporciona tantas satisfacciones con sus presentaciones, en las que se refleja parte de la historia y tradición del colegio. EL CAMBIO DE DENOMINACIÓN DE BANDA DE GUERRA POR BANDA DE MUSICA ESTUDIANTIL: El 3 de febrero de 2015, el señor ministro de educación Augusto Espinoza A., mediante decreto número 00025-A, cambia la denominación de bandas de guerra a bandas de música estudiantiles, bajo la consigna de “promover la paz, tener enfoque de integración y civismo; además de posibilitar la práctica y la reflexión de valores ciudadanos y democráticos”. Además, indica que el vocablo guerra, “presenta una connotación de lucha o disputa entre personas, lo cual no guarda coherencia con esta actividad, la misma que busca una convivencia pacífica de todos los miembros de la comunidad educativa, sin que existan rivalidades de ningún tipo”. Al mismo tiempo, norma la participación de los estudiantes en los desfiles cívicos, mediante los siguientes artículos: Artículo 3.- Carácter inclusivo. - Todos los eventos en los que los estudiantes participen tendrán un carácter inclusivo, evitando manifestaciones discriminatorias de cualquier tipo. Se prohíbe expresamente cualquier elección o selección de representantes estudiantiles sobre la base de características físicas. Artículo 6.- Temática. - Los desfiles que se preparen para la conmemoración de fiestas de cantonización, provincialización, fundación e independencia, deberán privilegiar las expresiones culturales propias del acervo nacional. Las temáticas y contenidos de los desfiles tendrán mensajes positivos, que estarán acorde con la edad de los participantes y deberán promover una cultura de paz. La temática será aprobada y socializada con al menos tres meses de anticipación a la realización del desfile. Artículo 9.- Bandas estudiantiles. - Las bandas de música estudiantiles de las instituciones educativas, deberán transmitir en su organización y repertorio, jovialidad y vivacidad con un enfoque de integración artístico cultural, priorizando piezas musicales nacionales y regionales. La mayoría de las autoridades de los colegios, acatando la disposición ministerial, cambiaron la música e introdujeron partes de canciones típicas y tradicionales que identifican a cada provincia. Se incorporó más mujeres en las bandas y tanto las cachiporreras, como las bastoneras ya no marchan sino bailan. Inclusive en los colegios que por tradición eran de mujeres, se facilitó la matrícula de hombres, quienes, al integrar las bandas de música estudiantiles, también bailan al compás de los ritmos típicos o autóctonos de cada región que interpreta la banda de música estudiantil. El colegio Benigno Malo, fiel a su historia, tradición y reconocido prestigio, acató parcialmente la disposición ministerial, al incorporar en su banda de guerra a mujeres, para que toquen algunos tambores y granaderos y continúa manteniendo la gallardía, elegancia de su uniforme blanco y negro y coordinación en sus marchas.

Rectores

Juan Bautista Vásquez, 1864

Andrés F. Córdova, 1923

Alfonso Cordero Palacios, 1940 - 1944

Referencias

  1. Telégrafo, El (8 de junio de 2014). «150 años del emblemático colegio Benigno Malo». El Telégrafo. Consultado el 24 de enero de 2022.
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